Cuando un niño escucha con atención a sus profesores, cuando se involucra activamente en las actividades, cuando siente y se emociona con los cuentos, vive cada día en clase y se refugia en los brazos de su maestr@... está siguiendo una estela.
La estela que dejemos como maestros será el mayor referente de amor y de cuidados que el alumno podrá recibir de su mundo escolar. Un mundo que, sin duda, le marcará por siempre y le inspirará.
Por ese motivo, hemos de cuidar al máximo nuestra estela, para que sea productiva emocional y académicamente hablando y para que inspire otras estelas, las que ellos dejarán en el corazón de los suyos y, quién sabe, si en los corazones de otros niños en el futuro si eligen ser maestros también.
🌱CUIDA TU ESTELA💫